Reseña: Cada vez que me tocas de Arwen Grey

Una de las últimas reseñas de este año es la Cada vez que me tocas de Arwen Grey. Una historia que sorprende al lector a medida que se adentra en la historia de la familia Beauchamp.

Título: Cada vez que me tocas

Autora: Arwen Grey

Autopublicado

Año: 2018

Sinopsis:

Como bibliotecaria en un pequeño pueblo inglés, Tara ha leído miles de historias sobre secretos familiares, legados ancestrales y conexiones con el destino. Jamás habría imaginado que sus vacaciones serían el inicio de una de esas aventuras de novela, y menos aún que un pariente muy, muy lejano, con unos hermosos ojos oscuros, la metería de lleno en una locura inimaginable.

 

Declan ha vivido toda su vida con la responsabilidad de recuperar el legado familiar de los Beauchamp, una lucha que ha manchado con sangre el pasado de su familia.

Al encontrar a Tara, de pronto todo lo que desea parece estar justo al alcance de su mano, pero también lo están otros aspectos inesperados de la herencia familiar, algo de lo que hablaban los romances antiguos y con lo que no contaba: lo que siente cada vez que él y Tara se tocan.

Reseña:

La historia arranca con un prólogo histórico que no sirve para comprender la trama de la novela. En este, la autora nos lleva  a la Inglaterra del siglo XIV y nos sitúa en  la catedral de Ely. Allí somos testigos de una tragedia  y que nos sirve  para entender lo ocurre después cuando la historia se sitúa en nuestros días.

Aqui encontramos a Tara, una bibliotecaria que lleva una vida más bien tranquila, sin sobresaltos. Hasta que durante sus vacaciones se ve envuelta en toda una trama de intrigas, herencias, familias antiguas, castillos y demás. Pero sobre todo porque conocerá a Declan, un misterioso hombre que aparece de repente en su vida y que le asegura que la necesita para recuperar el legado familiar. Pero todo esto, que puede sonar a una completa locura por parte de Declan se va a ir complicando cada vez más. Primero porque alguien está interesado en que Declan no consiga su objetivo y hará todo lo posible por impedirlo. Y además por una conexión inexplicable que existe en Declan y Tara y que se hace más acusada cada vez que se tocan. Es esta conexión sobre la que gira la historia de esta novela, y que a la vez da lugar a su título.

Pero lo que empieza como una aventura en busca de respuestas sobre acontecimientos pasados, también va dejando paso a un romance en el que ambos protagonistas se va metiendo poco a poco. Sí, porque a medida que pasan juntos tiempo y comparten experiencias, no se van dando cuenta que esa conexión que tienen, va generando una más emocional. 

Y lo que en un principio ha parecido un simple coincidencia por la manera en la que se han conocido, resulta no serlo tanto a medida que avanzamos en la lectura. No todo parece ser obra del destino sino de la mano de alguien. 

Se inicia pues una carrera por conseguir que Declan, recupere el legado de su familia sin darse cuenta de que al estar metido en ello, se ha olvidado de lo más importante: Tara. Declan solo parece interesado en conseguir la ayuda de Tara pero se olvida de lo demás. Incluso de que está utilizándola para lograr su propio beneficio. Pero como suele suceder, se da cuenta tarde de que el legado de su familia es algo más que tierras y un castillo.

La novela está escrita de manera muy amena, e incita al lector a devorar las páginas enganchado en todo este misterio de las herencias y las conexiones. En ocasiones estamos ante una novela de aventuras, de suspense, de acción aderezada con unos toques románticos aquí y allá. Bien incluidos en la trama principal. Y una historia familiar en la que todos lo personajes están relacionados desde hace siglos. 

No quiero dejar pasar la reseña sin hablar de personajes secundarios como Jena, la hermana de Tara, y que ofrece un toque irónico y pícaro a la trama. Reconozco que me he reído con ella al imaginarme las escenas en las que aporta su toque personal. Todo un personaje. 

Mary McNaught /Nana la abuela de las chicas y que tiene una parte bastante destacada en la novela. Y por último Louis Stewart, el ex de Tara que parece no darse cuenta de que ella no está destinada para él.

En conjunto la historia es muy entretenida en todos sus aspectos. Engancha desde el principio con el prólogo histórico y toda su relación con la trama de la novela. Los personajes son muy reales, no son millonarios excéntricos ni tíos cachas, sino personas de carne y hueso que puedes encontrarte en la calle, eso es lo que tiene esta novela. Una vez más Arwen consigue una trama original donde las haya que logra enganchar.