17 sept 2012

Reseña de Melodía Inmortal

Bueno pues una vez finalizada la lectura de Melodía Inmortal de Olga Salar, os dejo la reseña acerca de lo que me ha parecido. Con esta entrada doy por finalizada la lectura conjunta, la cual me ha resultado bastante provechosa.




Melodía inmortal conjuga tres elementos: la novela romántica juvenil, muy de moda en la actualidad; una historia clásica como es el Fausto de Goethe, la música como eslabón que une las dos anteriores. Y la dicotomía eternidad –muerte. Es interesante ver como los cuatro se fusionan en una sola: Melodía Inmortal. Pero ante todo es la fusión de una obra clásica como Fausto de Goethe, y la novela juvenil actual.

En cuanto al primer elemento encontramos los ingredientes clásicos de ésta clase de novelas. Un instituto, un grupo de jóvenes, con sus inquietudes y sus anhelos propios de su edad, el descubrimiento del amor por primera vez, y/o las relaciones típicas de estos chicos de diecisiete años con sus padres. Este sería el primer acercamiento a la historia.

El segundo punto, sería la aparición del mito de Fausto, que sirve para entrelazar con el primer elemento. Un mito que aparece doblemente reflejado en la historia. La relación Oliver – Gabriel en la que interactúa Danielle. A parte de ello, se hacen referencias a la obra escrita por Goethe. Para explicar su situación personal, Oliver le recomienda a Danielle que lea esta obra para comprenderlo mejor a él. A través de la figura del profesor de Literatura la autora introduce al lector en el mundo de Fausto, y en lo que esta obra supuso en la Literatura. Es un buen reclamo, y aliciente para que todos aquellos que no conocen la obra se acerquen por primera vez a ésta. Por lo tanto nos encontramos una vez más ante la vieja fábula de la venta del alma al diablo tan extensa en la literatura universal.

Y aquí entra el tercer y último componente: la música. Este es el objeto de la firma del contrato de Oliver con Gabriel. En la obra de Goethe, Fausto pedía acceder al todo conocimiento, viajar por todo el mundo, y tener toda clase de experiencias. Aquí, Oliver sólo quiere ser un gran músico. Poseer ese don que lo faculte para convertirse en un referente musical de su época, y porqué no de todos los tiempos. Pero como siempre sucede con el diablo, el pacto siempre le favorece. Gracias a esa música producida por Oliver, Gabriel es capaz de conocer los deseos de los jóvenes oyentes, y conseguir embaucarlos para que les cedan su alma. Al igual que en el Fausto de Goethe, Oliver trata de redimirse una vez que conoce a Danielle. A través del amor que nunca ha conocido. Pero para ello pondrá en peligro la propia vida de Danielle. El triángulo Oliver-Danielle-Gabriel, nos hace compararlo con el creado por Goethe: Fausto-Margarita/Gretchen-Mefistoféles. Pero con la diferencia que aquí quien fallece en trágicas circunstancias no es Danielle, la persona amada por Oliver/Fausto, sino su propia hermana. Es el elemento que diferencia una historia de la otra.

El final de la trama se asemeja bastante a la obra de Goethe. Danielle y Oliver logran burlar a Gabriel, logrando la redención del alma de Oliver. Si nos atenemos a la obra de Goethe, vemos que gracias al amor que Fausto sentía y siente por Margarita/Gretchen ha logrado que su alma se redima, lo cual aprovechan el coro de ángeles para reclamarlo. Eso mismo sucede cuando Danielle firma el contrato con Rachel entregándole su alma. Por último, que no menos importante, tenemos la dualidad eternidad-muerte. Oliver puede morir en cualquier momento si sufre un accidente, pero no puede hacerlo por edad. Mientras que Danielle es todo lo contrario. Su enfermedad la sitúa en una situación de extrema gravedad, de que puede morirse en cualquier momento. Es paradójico este hecho.

Personajes:

Danielle: Es una chica huérfana de madre, con una enfermedad cardiovascular congénita. Parece ser que su tiempo se acaba y que en cualquier momento puede fallecer. Su padre es el profesor de inglés de su instituto. En un principio se muestra atraída por su amigo Samuel, aunque en realidad ella siente algo especial por Oliver. No obstante, intenta hacerse ver que él no le conviene, que hay algo oculto en él. Se encuentra en una situación en la que debe elegir entre ambos: Samuel es lo conocido, la tranquilidad, su amigo de toda la vida. Mientras Oliver es lo desconocido, el peligro, el riesgo. Poco a poco se va adentrando en la otra trama de la novela: el mito de Fausto, y se convierte en parte activa de éste. Se convierte en el tesoro codiciado por Oliver, para redimirse, como por Gabriel para ascender en la jerarquía de Lucifer, y de paso atormentar más aún a Oliver. Podríamos calificarla como el juguete que tanto el Bien como el Mal ansían poseer. Danielle no duda en arriesgarlo todo por salvar a Oliver, ya que ella sabe que su tiempo es limitado. Sin embargo, no duda en afirmar que tiene miedo a la muerte. Es muy joven para morir.

Oliver/Fausto: Representa la eternidad. El misterio, lo desconocido, lo oculto, el peligro. El arquetipo del chico malo en el que todas las chicas del instituto se fijan. En el personaje de Oliver se fusionan dos estilos: los modales caballerescos del siglo XVI, con la apariencia de un chico del siglo XXI. Es frío, calculador, pretende alejarse de Danielle para no hacerle daño. Pero cuanto más se aleja, más siente la necesidad de acercarse hasta ella. Es el amor por Danielle lo que lo cambia, lo transforma hasta el hecho de que siente por ella algo. ¿La  quiere? No duda en arriesgar su vida y enfrentarse a Gabriel para salvarla, para evitar que venda su alma. Pero al final es ella quien lo salva y lo redime a él.

Gabriel/Mefisto: Representa la tentación para los mortales. Es el abogado del diablo cuyo cometido es reclutar almas para ascender en la jerarquía del infierno. Se hace pasar por el tutor legal de Oliver, ya que éste no tiene padres. Es misterioso, enigmático, con un don de la palabra y unos modales exquisitos que cautivan a cualquiera. Danielle llega a pensar que si no fuera quien es, podría incluso fijarse en él. Codicia a Danielle, y no duda en acercarse a sus amigos para presionarla para que le venda su alma, y arrebatársela a Oliver. Sin embargo, al final al igual que sucede con el mito de Fausto, y la obra de Goethe, Mefisto se verá burlado perdiendo el alma de Fausto en este caso de Oliver.

Samuel, Andrea, Marc, Rachel  Son personajes secundarios que ayudan a completar la trama. Samuel es el mejor amigo de Danielle, enamorado de ella desde que se conocen, se siente traicionado cuando ella se decide por Oliver. Influenciado por Gabriel para obtener el alma de Danielle, no duda en atacarla, o dejarla de hablar. Busca provocarla. Andrea es la mejor amiga de Danielle, a quien le cuenta todas sus secretos, problemas, intimidades. La apoya en todo momento y más sabiendo que es muy probable que pronto la pierda. Marc es el chico que sale con Andrea. Es amigo de sus amigos, y no duda en pedirle a Danielle que intente salvar a Samuel de la situación en que se ha metido.  Rachel su imagen de chica solitaria, siniestra, y algo borde contrasta con su verdadera identidad y cometido. Es un ángel que pretende evitar que Danielle cometa la locura de entregarle su alma a Gabriel. Junto a Oliver organizarán un plan para engañar a Gabriel y evitar que Oliver se condene para la eternidad, y que Danielle evite entregarle su alma.

Otros personajes secundarios serían el padre y el tío de Danielle cuyo principal cometido es aconsejar a Danielle.


A titulo personal he de decir que la novela me ha sorprendido por el ingenioso tratamiento del mito de Fausto; y por como lo ha fusionado de manera magistral la autora con la novela juvenil actual. Un mito que hoy en día sigue teniendo vigencia literaria, y que puede adaptarse de muchas maneras. La música como hilo conductor de la trama, y como eslabón para unir el mito con la realidad. 




4 comentarios:

  1. Hola, hice la una entrada anunciando el estreno de este libro... pero termino de llamarme, supongo que sin querer aparto a un lado el tema instituto, jovenes...(juzgandolo un poco, como mas de lo mismo) , pero la verdad que tu reseña me ha dejado con la intriga, parece interesante, lo mismo me animo a leerlo. Un saludo y gracias por la reseña!!

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    1. A mi el tema del mito de Fausto me despertó curiosidad por ver como lo trataba en un entorno juvenil, y la verdad no le ha quedado mal aunque tenga que ver con instituto, jóvenes, y demás.

      Me sorprendió bastante. No sé si leeré la continuación que acaban de editar.

      Un saludo :) y de nada.

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  2. La verdad es que a mí me gustó bastante este libro, todavía más la segunda parte. Me gusta tu forma de hacer reseñas, muy detallada y bien explicada :)

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    1. Hola Zaiare gracias por tu comentario. Espero leerme le segundo pronto. Lo tengo en espera. Le alegra que te guste mi forma de hacer reseñas.

      Un saludo

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